por todos los instantes vividos,
por las nuevas cosas que aprendí
por los amigos nuevos conocidos
y también por aquello que tuve y que perdí.
me comparto,
me entrego,
me alegro,
me estremezco,
y no olvido lo bueno del vivir.
agradezco los abrazos y afectos,
los regaños y castigos,
los consejos y cumplidos,
de todos aquellos que me han hecho feliz.
agradezco las nuevas canciones,
los nuevos sonidos,
los viejos poemas y los viejos amigos,
el buen humor y la familia contenta,
el buen amor y la paz en mi puerta.
agradezco;
buenos y malos momentos,
las historias sin tiempo,
y el tiempo sin historias.
por todo eso siempre me comparto,
me entrego,
me alegro,
me estremezco,
y no olvido lo bueno de existir.
agradezco,
las horas instruidas,
el silencio bienvenido,
los más de mil instantes vividos
y por todo aquello que perdí.
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